Saga Guías/Protección

Protección

Por InnerRayg

La criatura se arrastró, moviéndose con sensores sin visibilidad sobre el suelo deslucido, manchas de sangre seca cubrían la pared... Hasta aquí llegaba su edad, su tiempo de vida. Una vez que estuvo en manos de aquél, el de las sombras... no le tuvo miedo, el miedo no estaba en su naturaleza. Sin embargo, estuvo terriblemente sorprendido cuando se encontró en un recipiente con otros como él. Durante eones no habían habido otros... entonces sus voces en cascada sobre él casi parecían eliminarlo de la existencia. Gritaban y correteaban, algunos temblaban en las esquinas y otros miraban fijamente el abismo como toda esperanza estaba perdida. No había ninguna intención oculta, ya que estas criaturas, las que eran parte de él, todas compartían una sola mente. Y en esa mente, formaron un plan.

El trabajo de Makuta sólo estaba parcialmente terminado. Estos gusanos extraños que había descubierto tenían una sensación extraña sobre ellos... le recordó a sus Kraata cuando dio un vistazo al recipiente, donde cientos de ellos se encontraban. Eran diferentes, por supuesto, más largos, con piernas mucho más desarrolladas y no estaban bajo su control. Se preguntó acerca de ellos, sin encontrar referencias en ningún lugar, de Matoran o de Cazadores Oscuros. Parecían no tener defensa, pero endurecían las paredes a donde quiera que fueran, por lo que estaba seguro de que alguien más los había visto. Obviamente, esos otros nunca regresaron para contar la historia. Fue sólo cuando dio vuelta a un recipiente de Protodermis caliente que encontró algo más peculiar. El tubo de contención estaba vacío.

¿A dónde se habían ido?

El plan de la criatura era muy simple. Juntos, podrían formar una cadena sobre el borde de la sala de contención, y entonces se irían. Los que estaban en la parte inferior se arrastrarían sobre sus hermanos, y luego se escabullirían en las esquinas. Los otros pronto lo lograron, y se quedaron junto a sus nuevos compañeros. Temían la recaptura, pero Makuta había estado en lo cierto acerca de ellos, excepto por el método emocionante de asfixiar a sus presas bajo su masa colectiva, no tenían ninguna defensa. Fue entonces cuando los recuerdos de el volvieron, y así todas las cosas sabidas a la vez eran lo que debía hacerse.

Makuta había recorrido sus cavernas, viajando incluso a lo más profundo del Mangaia buscando a las pequeñas criaturas que había perdido. El ser sobrepasado en inteligencia era algo a lo que no estaba acostumbrado. No le gustaba... en lo absoluto.

Fue una especie de sorpresa el encontrar el nido de los Bohrok destrozado, y cuando Makuta lo vio estuvo de acuerdo en que estas criaturas tenían una gran voluntad. Usando su masa juntas una vez más asumió el, tuvieron que haber invadido en las cápsulas. No estaba muy seguro en que los cuerpos con energía, similares a insectos robóticos podrían ser utilizados... pero recordando que esas cosas no habían sido mucho más grandes que esas Krana que por lo general se colocaban en la placa de cabeza.... él sonrió, torciendo su cráneo oscuro en una expresión poco familiar. ¡Estas cosas eran inteligentes cuando se unían!

Acostumbrarse a la placa era difícil para las criaturas. Fueron aplastadas perdiendo su forma por el espacio reducido de la placa de cabeza, y la interconexión con la red que controlaba el movimiento no era fácil... pero por ensayo y error, juntos con la mente colectiva que no fallaba dos veces, encontraron una forma. Atravesaron los pasillos, buscando víctimas con su nuevo poder... sí, habían sido débiles una vez, pero pronto serían fuertes.... MUY fuertes....

Personajes

• Lombrices
• Teridax
• Bohrok